Primeras impresiones "Atelier": cuando Japón y Netflix se unen por el glamour de la lencería.

Hola, que tal, como están todos? Aquí en Chile estamos en feriado, así que eso hace de esta una muy buena semana, pese a que el calor que se está sintiendo  haga estos días un poco más pesados (y sudorosos XD) de lo ideal. Pero bueno, contra las inclemencias climáticas nada se puede hacer, así que mejor vamos a lo que nos convoca en esta ocasión: Netflix y Japón. Así es, porque como ya lo he dicho en varias entradas anteriores, estoy en sequía de dramas, y la verdad ya me rendí por este año, por lo que ayer cuando me encontré con un tiempito libre, me fui al buen Netflix a ver alguna película para matar el tiempo, y oh, sorpresa! en el catálogo de recientemente agregados mi visión de águila divisó un par de ojos rasgados en la imagen de portada de lo que yo creí era una película japonesa de nombre “Atelier”. Pero no, revisé la descripción,  y se trata de el primer dorama original producido en conjunto por Fuji TV de Japón y Netflix, agregado al catálogo de este último hace nada más unos días. Me puse a revisar noticias sobre esto en internet, y efectivamente, a mediados de este año ambas compañías firmaron un acuerdo para la producción de contenidos originales a ser distribuidos exclusivamente por Netflix, en principio dos series, siendo Atelier uno de ellos.

El drama sigue a su personaje principal, Tokita Mayuko (Kiritani Mirei), una joven recién titulada de la Universidad en diseño textil, quien en Tokyo ingresa a su primer trabajo como aprendiz en el mundo de la moda, en un taller de diseño y confección de lencería de alta clase llamado “ Emotion”, dirigido por Namjo, una diseñadora y modista de fama nacional, con más de 30 años de experiencia en el rubro, y quien impone tendencias en el mundo de la moda de lencería con sus diseños. Mayuko descubre un nuevo mundo de glamour y elegancia con su ingreso al taller, donde experimenta la confusión por las expectativas y realidades que se contraponen en su nuevo rol, pero al mismo tiempo logra crecer en este mundo con una serie de valores diferentes a todo lo que ella había conocida antes.

Bien, en términos generales de eso se trata el drama. He visto sólo los 3 primeros, y en base a ellos les daré mi opinión: es un drama que ya me atrapó, pero no por lo que comúnmente nos  atrapa un drama (actuación, guión, dirección, fotografía), sino por un sentido estético que logra traspasar la pantalla, por un enfoque en el trabajo casi artesano que se realiza en ese taller a partir de las materias primeas para llegar a producir ropa interior femenina que, más allá de la belleza y funcionalidad que los caracteriza, representan los más profundos deseos de la mujer. En lo capítulos que he visto, el foco se centra al 100% en la lencería, la concepción de su diseño, el diseño mismo y su confección, la funcionalidad y características de los materiales, y eso me encanta!.

Me explico: mi madre es costurera, por lo que crecí viéndola siempre cosiendo a mano, o bordando, o trabajando en su Singer o en la Overlock y como consecuencia de ello, los costureros llenos de hilos, botones, broches, elásticos, encajes, cierres, agujas, alfileres, tijeras y demás materiales de trabajo fueron mis primeros juguetes (aún recuerdo que le ponía nombres a los carretes de hilos para armar historias con ellos :p). Lamentablemente, mi falta de habilidades manuales me impidió aprender a coser tan bien como mi madre, pero la fascinación por ese mundo jamás se esfumó: hace un par de semanas, durante mis vacaciones, fui luego de años al barrio Independencia donde se concentra gran parte del comercio textil de Santiago, y volví a enamorarme de las telas y cordonería. Les dejo abajo unas fotitos para que vean lo maravilloso que es este barrio.

Pero bueno, volviendo a mi punto, esta experiencia de vida personal ha hecho que siempre me encanten las historias (libros o películas, teleseries o dramas) vinculados con la moda, y con la moda como protagonista.. Y con Atelier me pasa eso: es la moda de lencería la protagonista absoluta, veo una clara intención de mostrar un trabajo artesano detrás de esta industria, más allá de la importancia de los personajes de la historia.

La verdad es que hasta este punto no ha habido un gran desarrollo de la historia de la protagonista propiamnete tal: es decir, Mayuko llega a su primer día de trabajo con todo su discurso contra la vanidad e inutilidad de la belleza, frente a la funcionalidad que tanto defiende, mientras que su jefa (y todo su taller tras ella), no deja de remarcar que la belleza es una arma para la mujer, y que trasciende la  vanidad sin contenido que se le imputa. Y en ello el diseño de lencería tiene mucho que decir. Me gusta ese desarrollo del guión, y que se tomen las dos corrientes que usualmente se enfrentan en el mundo de la moda.

En cuanto a los personajes protagonistas: Mayuko es una chica de drama muy común: un poco torpe, soñadora, desastrosa en el vestir, poco vanidosa, pero esforzada al máximo. Por supuesto, hay cambio de look, así que no desesperen por como la ven los primeros minutos! Jeje. En cuanto a su personalidad… llega a ser un poquitín desesperante a veces, pero nada terrible. Ahora, más atractivo que ella resulta ser su jefa, la señorita Namjo: el personaje es a todas luces un “homenaje” a Anna Wintour, la famosa editora de Vogue, y en cierta forma también de Miranda Prietsley, directora de Runaway en la película “Devil wears Prada” (que por lo demás, también está inspirado en Anna Wintour): el look es una clara manifestación de ello, aunque su carácter es menos glacial y distante que el de las mujeres antes mencionada, y en ocasiones tiene rarezas que son de risa.

Bueno, se preguntarán ustedes, qué tiene de distinto un drama producido en conjunto con Netflix con uno común de Japón?. Debo decir que pocas diferencias: la más importante es la calidad de la imagen, ya saben quienes siguen dramas japoneses que es muy difícil encontrar páginas que los transmitan en buena calidad, y en Atelier la mano Netflix se nota. Por otra parte, hay otras cuestiones técnicas que lo hacen distinto de un drama común japonés: movimientos de cámara a mano, enfoques o primeros planos poco usuales, etc. Pero, siendo contenido exclusivo Netflix, el drama grita con todo orgullo: soy japonés!!, sobretodo se advierte ello en la caracterización de ciertos personajes, que a veces tienen rasgos o comportamientos claramente inspirados en el mundo manga o animé. El ritmo del drama por lo demás es muy pausado, no frenético como suelen ser otras series.  

Bien, creo que ya he dicho mucho para los escasos 3 capítulos que he visto. Ah! Son un total de 13, de 45 minutos cada uno aproximadamente, y ya están todos disponibles para su visionado. Se los dejo muy recomendado para quienes tengan Netflix, es una interesante y original alternativa a lo que suele ofrecernos Japón. Ahora, debo decir que Fuji TV es una de las 2 principales cadenas de tv de Japón, y ha producido una cantidad de doramas de culto impresionantes: Nodame  Cantabile, Hanazakari no Kimmitachi, Ichi rittoru no namida, Itazura Na Kiss, Boku no ita jikan, Liar Game, Biblia Kashodou, Saikou no rikon, todos los cuales he visto y son prueba de calidadEn ese país, ha sido titulada “Underwear”. Es muy interesante sí que Netflix ya haya puesto sus ojos en el mercado televisivo asiático, reconociendo una tendencia muy fuerte en diversas regiones del mundo por seguir estas producciones. Primero fue Japón, les gustaría que Netflix colaborara con alguna cadena de Corea? De allí, tvN es mi candidata!. Me cuentan sus opiniones!!.